-¡Hola!- dijimos ambas…acompañada de una sonrisa bastante fingida…primero mi familia..luego la suya, al concluir el CIAO/BYE/BESITOS y de caminar discretamente algunos pasos, hice varios insultos mentales hacia su persona, lo cual me consternó… ¿porqué me molestaba tanto este personaje?. Aunque honestamente no es el mejor ser humano que conozco, nunca me había hecho absolutamente nada malo o incluso perjudicado mi persona en ningun sentido... Justifiqué ese pensamiento negativo con los incidentes que ella había tenido con familiares y amigos, a pesar de encontrar bastantes momentos incómodos a lado de ella, no logré responderme…decidí no profundizar más sobre esta situación.
Años después de este suceso (gracias a la tecnología y al factor suerte) me topé con varias fotografías de ella, me pareció desagradable verle, sonriente, con miles de poses, joyas, planchados, gente de la “alta” y rodeada de mucha gente que parecía quererle, de nuevo me pregunté ¿en realidad será tan buena como dice? pensamiento bastante fuerte que denotaba que aun me molestaba su existencia… Así que antes de sacar la interminable lista de defectos que siempre repito mentalmente, pensé en que sus hijos se veían felices, que la querían muchísimo, que eran personas bastante completas y realizadas…y pensé tal vez no es tan mala como pienso.
-¡Qué va!- me dije. La verdad esto no cambió mucho mi malestar hacia su posible presencia, pero si mi percepción hacia ella, pero creo que lo más importante fue mi percepción sobre mi…primero porque seguramente ella no siente ese malestar, es aun más posible que ni si quiera me atraviese en sus pensamientos y por último porque esa sensación no es más que...en fin, solo eso.
